Cada vez que te tengo a ti
siempre a la vista con alivio suspiro,
Aunque suelo exagerar, no es suficiente,
Debo tenerte siempre muy cerca de mí.
Esta tonta no hace más que tropezarse,
el mismo error repetir.
¿Cuánta fuerza requiero yo para que nada
resulte herido nunca con mi protección?
Sin dudar en mí y con decisión,
confiaré en este amor que
Hoy me hace vivir con una misión,
mientras te abrazo fuerte
Por la vida iremos juntos los dos,
no podría al pasado regresar,
Y me temo que el dolor permaneció,
imborrable del pecado que cometió
Mi amor.
Aún recuerdo la pérdida de aquél día,
el dolor aún me corroe,
Me he quedado perpleja por tanto llorarlo,
y al cielo gritarlo reclamándole.
Aunque deba sacrificar todo lo que tengo,
nada de eso funcionará.
Y me pongo a reflexionar en esos ojos
que reflejan todo y que aún no olvido.
No tengo temor aun sin poder,
el destino me hace fuerte
Será nuestra unión, las manos tomar,
las que nos mantengan siempre.
Si pasara, no importará el dolor
del pecado que llevo en mi corazón.
Mientras yo esté contigo, aun si el mundo se acabó,
No hay motivo ni razón para no desafiarlos.
Sin dudar en mi y con decisión,
confiaré en este amor que
Hoy me hace vivir con una misión,
mientras te abrazo fuerte
Sin dudar en mi, aún sin poder,
el destino me hace fuerte,
Como prometí contigo estaré,
conectados para siempre.
Hacia el frente, a tu lado seguiré,
y unidos, hacia atrás no miraré
Protegiendo con mis manos tu honor
si no puedes por ti mismo hacerlo,
Mi amor.