Un camino sin retorno
un trapecio donde salto sin la red
una puerta que se abre
y de pronto frente a mí está el Edén.
Me libero,me transformo
y me entrego de una forma natural
y te quiero como a un niño
sin recelos y sin cartas que ocultar.
En tu cuerpo
me llueven las palabras desde el cielo
me queman las caricias en los dedos
y gasto los tesoros de tu cuerpo.
Espera, y llévame en tus brazos a volar
no ves que soy una mujer normal
dentro de ti.
En tu cuerpo...
Descubres con tus labios
los secretos escondidos de mi piel
te siento como a un niño
sin recelos, sin cartas que ocultar.
En tu cuerpo
me llueven las palabras desde el cielo
me queman las caricias en los dedos
y gasto los tesoros de tu cuerpo.
En tu cuerpo....