Cuando me muera dejaré en el barro
la huella eterna del que va,
y los hijos y los ancianos
bailarán en el funeral.
Cuando me vaya dejaré en el viento
semillas de mi voluntad,
y cuando vuelva, en cualquier tiempo,
cosecharé lo único que fui.
El mar no está tan lejos,
no está tan lejos.
El mar no está tan lejos,
no está tan lejos.
El mar no está tan lejos,
no está tan lejos.
No está tan lejos.
La vida muere, la muerte vive.
El que camina siempre va a buscar,
la vieja fuente de vida eterna
no es tan difícil de encontrar..