Irradian cierta tristeza tus murmullos
Por eso mi poema es el poema tuyo
Y son mis palabras tercas, latido jondo
Las gotas de agua de lluvia
De algún diluvio, de algún otoño
En el que me arranco la piel
Cuando se pone a llover
Cuando me dejo arrastrar por el mar
Que me lleva al amanecer
Cuando me vuelvo acostar
Y se me traga el colchón
Cuando me muerdo la lengua, los huesos y el alma
Por no decirte que yo …
Me pongo como un loco
Me pongo como una moto
Si me rozas el alma
Me estiro, me encojo
Me levanto mil kilos
Si me rozas el alma
El mar sigue bañando un haz que escondo
De luz de lunas de cruz en ruinas de asombro
De un horizonte que atisba al lavar las heridas
De una sonrisa apocada
En cada invierno, en cada esquina
Y siento en mis adentros que no queda tiempo
Mi amor será tan libre como tu silencio
La rabia siempre firma con los sentimientos