No sé si hubo algo
Que me haya hecho soñar
En un instante todo
Se vuelve realidad
Los pájaros de fuego
Se vuelven contra mí
Me secan y me encienden
Negándome a seguir
Vacio, rodeado
Llorando por un siglo
Todo lo que tengo
No lo verás jamás
Extraño y condenado
A no mirar atrás
Los templos que vomitan
Los rezos del dolor
Hacen reir al cielo
Y al mal que hay en tí
Señor
Vacio, rodeado
Llorando por un siglo