Lerelerelere lere...
Y a un santo Cristo de acero
le hice de que llorara,
y a un santo Cristo de acero,
le hice de que llorara,
que cuando el santo Cristo lloró
sería de carne humana.
Que al gurugú guruguero,
yo no me caso
porque no quiero.
Pobrecita de mi mare,
llorando de pena está,
que vienen los lunares
ay buscando a mí hermano Juan.
Pobrecita de mi mare,
ay llorando de pena está.
Yo no quiero que me hables,
yo no quiero que me hables,
si en el mundo hay mala gente
pero como tú no hay naide.
Ay, que bueno está
que bueno está,
por la mañanita
mantequita y pan.
(BIS).