La puerta abierta
siguiendo a la estrella del ocaso
buscando siempre algo mejor
vuela el alma no hay credos ni razas
días de lluvia y de hazañas
faro y guía que has de brillar
como un volcán ardiendo y no habrá más
en regueros de azufre arde nuestro río
en la baranda del balcón
cigarro en mano y sin dormir
la soledad es guía y el viento es manantial
vamos por el mundo sin saber
en cuántas direcciones es amor
de qué sirvió lo que vivimos ayer
buscándonos la espalda
saber sentir en nuestra piel
la lluvia golpeando
atravesando la puerta abierta
saber sentir que contra ti
arrecia la lluvia y atraviesas
puertas cerradas
me mostraré en silencio no hay duelo ni razón
amando lejos buscando una canción
tres almas y un amanecer segunda y última oportunidad
ahora sería el momento de escribir sobre la piel.