Cuéntame, dime quien te ha colgado el mar de las pestañas
y ahora dársena de estiércol se tornó la comisura de los besos
sed de limón, cimbrear como las espadañas
y en el hueco de mi espalda y la pared
cuelga tu nido del revés
y cada huevo parido es nada
y cada beso en la boca es nada
como si no hubiera pasado nada
un reguero de luna será nuestra casa
de esta luna tan puta de pechos de plata
será el arrullar de la libertad
que tiene cogida pa ti y para mí en la goma de sus bragas
cuéntame del llover, de los días de mierda y cuchara,
de la rara podredumbre del querer cuando no falta nada,
porque sé que el saber no sirvió para dañar tus labios
y que te sobra todo lo que va después
del “yo te quiero” y “yo también”
y mi costilla arrancada es nada
y cada trino quebrado es nada
que fuimos, somos y seremos nada
aguacero de soles caerá en nuestra cama
que sólo quiere amores de piernas mojadas,
y dejarnos prender, que no es menester
ponernos en pie, tú como luna en celo y yo como una cabra
regaré sin querer con silencio de estrellas tu cuarto
que no anhela más que el grito del papel
en el que he escrito mi quehacer
que nunca más servirá de nada,
si su tronío se queda en nada,
cuando su savia ya no riega nada..