En una pueblo nació, fue deseo de Dios,
crecer y sobrevivir a la humilde expresión.
Enfrentar la adversidad
con afán de ganarse a cada paso la vida.
En Sarmiento forjó una derecha inmortal
con experiencia sedienta ambición de llegar.
De cebollita soñaba jugar un Mundial
y consagrarse en Primera,
tal vez jugando pudiera a su familia ayudar...
A poco que debutó
“Juan Carlos, Juan Carlos ",
la voz de el fue quien coreó
“Juan Carlos, Juan Carlos ".
Su sueño tenía una estrella
llena de gol y gambetas...
y todo el pueblo cantó:
“Juan Carlos, Juan Carlos ",
nació la mano de Dios,
“Juan Carlos, Juan Carlos ".
Sembró alegría en el pueblo,
regó de gloria este suelo...
Carga una cruz en los hombros por ser el mejor,
por no venderse jamás al poder enfrentó.
Curiosa debilidad, si Jesús tropezó,
por qué él no habría de hacerlo.
Y es un partido que un día el Juank está por ganar...
A poco que debutó
“Juan Carlos, Juan Carlos ",
la voz de el fue quien coreó
“Juan Carlos, Juan Carlos ".
Su sueño tenía una estrella
llena de gol y gambetas...
y todo el pueblo cantó:
" Juan Carlos, Juan Carlos ",
nació la mano de Dios,
" Juan Carlos, Juan Carlos ".
Sembró alegría en el pueblo,
regó de gloria este suelo...
Olé, olé, olé, olé, Juank, Juanka.