En Busca de la Tierra Prometida


Mírame, perdido en éste desierto
con hambre y con sed a él voy siguiendo.
Soy un siervo de Dios siguiendo al resto
hacia una tierra que él prometió.

Llevo ya caminando unos años
sin que él extienda su brazo
casí perdí la cuenta del tiempo
mientras veía a otros caer.

¿Dónde está aquella tierra que él prometía?
La verdad: no sé si seguir o no.
Muéstrame tan solo una señal que me anime
a seguir creyendo en ti, oh, señor!

Un israelita, soy uno entre miles
llevo ya cuarenta años perdído
comiendo lo mismo: maná día a día
mientras él de nosotros se reía.

Mientras Moisés subía a una montaña
yo oredené: dadme todas las joyas;
con ella fundamos un becerro de oro
para tener algo en lo que creer.

Y bajó Moises con una tabla entre las manos
que contenía escritos diez nuevos mandatos,
pero nos vió adorando a un Dios equivocado
y tiró, la tabla contra el suelo partió.

"ISRAELITAS, ME HABEIS FALLADO,
PERECEREIS TODOS AQUELLOS QUE ANTE LA ESTATUA OS INCLINASTEIS.
LA TIERRA PROMETIDA ESTÁ MUY CERCA,
PERO SÓLO UNOS POCOS LA PODRÉIS DISFRUTAR."

Dicho ésto esperaba mi muerte
he arrastrado a muchos conmigo,
tan solo espero que los que no mueran
sea verdad que encuentren esa tierra.

Y qué culpa tengo si necesitaba algo en que creer
para seguir caminando por éste desierto y él no se dejaba ver
creé el becerro para que ellos pudieran andar
sin preguntarse si merecía la pena seguir sin mirar atrás.

Mi vida se acaba
Dios se regocija
viendo cómo muero
en este desierto
tras años de hambre
sed y sufrimiento
mi vida termina por un Dios molesto
que no aparecía los días de agonía
de hombres, mujeres
niños y mayores
él no aparecía
¿cómo pretendía
que creyera entonces en él?