Amanece la revolución
en mis alas rotas, en mi respiración
cuando apenas nadie queda en pie
para poderlo contar.
Amanece la electricidad
en el cuarto de atrás: lo que sea será
es el momento de elegir
con los cinco sentidos.
Hoy mi vida merece la pena,
hoy mi vida yo la vivo al pie de la letra.
Que nadie me detenga
cuando el tiempo se detenga
que nadie me condene
por amar a quien yo quiera.
Pero mi única aspiración
tan sólo era poder soñar
un sueño interminable
y no tener que despertar.
Todo cambia, afortunadamente,
todo cambia y yo he cambiado con los años.
Que nadie me detenga
cuando el tiempo se detenga
que nadie me condene
por amar a quien yo quiera.
Y ya no es necesario
que siga rizando el rizo....