Viejo rincón de mi triste pasado,
yo, como tú, también seré olvidado.
Bailemos juntos hasta el despertar del sol,
disfrutaremos de este gran final del corto adiós...
Eternidad, hoy escribiré tu fin
tanto horror, tanto mal... se merecen morir.
Nunca pensé que llegara el momento
en que en mi interior se creara el silencio.
Todo lo que yo fui, todo aquello murió,
entre los gritos de las vidas que mi sed segó.
Eternidad, hoy escribiré tu fin
tanto horror, tanto mal... se merecen morir.
Tanto horror... tanto horror...
¡Tanto horror!
Eternidad, hoy escribiré tu fin
tanto horror, tanto mal... se merecen morir.
Aquí, junto al mar, aquí esperaré al sol
que me traiga la paz, que me dé su perdón.