Esto fue lo que ella me dijo una vez:
-¿Cómo puede llegar a matar alguien normal?-
Pero últimamente, cuando toma una copa de más,
me amenaza de muerte, y yo sé que es capaz.
Y ahora que ya se ha ido
lo está susurrando mi voz:
No es tan largo el camino
ni tan lento el dolor.
Y fui a pedirle consejo al viejo fakir.
Dije: -Muéstrame el sitio donde debo dormir-.
Él me daba la espalda para hablar
y en sus llagas, de pronto, encontré la verdad.
Y me dijo: -En la guerra, saber ser un buen perdedor
es más importante que la paz y que el amor-.
Y pregúntale al hombre
del quiosco que mira al mar.
Pregúntale a la mujer
que jura ser Lady Di.
Pregunta a cualquiera,
que todos ellos te dirán:
-Cuando hayas acabado
no habrás hecho más que empezar-.
Y amor mío, en la guerra,
saber ser un buen perdedor
es más importante
que la paz y que el amor.
Mucho más importante
que la paz o el amor.
Y recuerda, amor mío,
bajo el sol
no es tan largo el camino
ni tan lento el dolor.
Tan largo el camino,
tan lento el dolor..